Niños expuestos a la violencia conyugal
Cada año en Canadá medio millón de niños esta expuesto a la violencia conyugal, estos niños fueron testigos de violencia o se encontraron cerca del lugar donde sucedieron los hechos.
Según un estudio hecho por Salud, Canadá en el 2006 de 60 a 80% de los niños cuya madre es víctima de violencia conyugal, son testigos de esta violencia.
Durante largo tiempo, las huellas visibles y perdurables que en estos niños expuestos deja la violencia conyugal fueron banalizados y minimizados. Ahora según los resultados de numerosos estudios no hay ninguna duda sobre las graves consecuencias psicológicas y de comportamiento que tienen los niños testigos de agresión contra su madre. Además estos estudios demuestran también que los niños expuestos a la violencia presentan dificultades en su desarrollo social y escolar
El informe sobre la violencia contra los niños, obtenido de un estudio llevado a cabo por la Secretaria General de las Naciones Unidas, demuestra que los niños que viven en un contexto de violencia familiar pueden ser ellos mismos víctimas de violencia. Igualmente, según el informe, los niños expuestos o testigos de violencia conyugal corren el riesgo de presentar comportamientos más agresivos que sus pares. En efecto estos niños recurren más fácilmente a la violencia para resolver sus conflictos y desarrollan una gran tolerancia a la violencia.
Las consecuencias de la violencia conyugal en los niños varían de un niño a otro. En efecto, muchos factores como la edad del niño, la proximidad de la violencia, la duración y la severidad de los actos de agresión pueden influir en la respuesta del niño frente a estos. Sin embargo, todos los niños expuestos a la violencia viven difícilmente la atmosfera de miedo y de inseguridad familiar.
En general los niños expuestos a la violencia conyugal viven el miedo, la ansiedad y el sentimiento de impotencia. Pueden culparse y sentirse responsables de la violencia que vive su madre.
Intervención
La intervención madre-niño en la Casa de Mujeres inmigrantes se apoya sobre la perspectiva del poder de acción de las madres y de sus niños, deteriorado por la violencia conyugal.
Los objetivos principales de la intervención con las madres son:
-
Rehabilitar o restablecer en las madres el poder decidir frente a sus niños;
-
Restaurar sus capacidades en su papel de madre
-
Restablecer y mantener una relación de calidad con sus hijos;
-
Mejorar sus conocimientos sobre las consecuencias de la violencia conyugal sobre el comportamiento y el desarrollo socio-afectivo de sus hijos.
-
Informar a las mujeres de los recursos disponibles para ellas y para sus hijos.
Los objetivos principales de la intervención con los niños son:
-
Ayudar a los niños a expresar sus vivencias para que comprendan mejor su situación;
-
Retirar la responsabilidad y la culpa a los niños sobre la violencia vivida por sus madres;
-
Alentar a los niños a participar en las diversas actividades (juegos, deportes y pasatiempos) a fin que puedan vivir su vida de niños.
La intervención intercultural con las madres y sus hijos se basan en la realidad de estos niños tomando siempre posición contra la violencia y respetando su ritmo y valores culturales. La intervención con los niños, a través de todo el proceso, se apoya en la implicación de las madres.